Para esta actividad sólo necesitamos guantes de látex y legumbres que tengáis en casa. Podemos utilizar garbanzos, pasta de espirales, arroz, sal y harina. También podéis rellenarlas con algodón, de gel, gomina para cabello, de plumas, etc, eso ya depende de vuestra imaginación.
La harina, sin duda, les gustará mucho porque al apretar con los dedos marcarán su huella y la sensación de estrujar los guantes será muy placentera. Con estas manos podemos trabajar el tacto, blando y duro, y hasta la discriminación auditiva, porque podemos dar golpecitos con la mano en el guante de garbanzos y hace ruido.
Es una actividad con la que disfrutarán muchísimo y muy sencilla de hacer.